11 febrero 2007

DUERMEVELA

Con ese título, han creado una revista en la web, Olaya Pazos y David Barreiro, que definen ellos mismos: Duermevela es la revista para los que queremos soñar despiertos.
A mi me la ha recomendado el padre de Olaya, que una ya está en esa fase de ser amiga, compañera o conocida de los padres de... En este caso de Olaya. Y además, en el último número, en la sección "Noctámbulos" José Manuel escribe sobre algo que conoce muy bien: los vinos, que armoniza con música, en este caso "Fados" y que titula "Fados nuevos y vinos viejos".



Os lo recomiendo. Y a uno de mis lectores de manera especial porque los autores comparten contigo su admiración por Paul Auster, entre otros.

10 comentarios:

  1. POVO QUE LAVAS NO RIO.
    Letra: Pedro Homem de Melo
    Música: Fado Victoria

    Povo que lavas no rio
    E talhas com o teu machado
    As tábuas do meu caixão.
    Pode haver quem te defenda
    Quem compre o teu chão sagrado
    Mas a tua vida não.

    Fui ter à mesa redonda
    Bebi em malga que me esconde
    O beijo de mão em mão.
    Era o vinho que me deste
    A água pura, puro agreste
    Mas a tua vida não.

    Aromas de luz e de lama
    Dormi com eles na cama
    Tive a mesma condição.
    Povo, povo, eu te pertenço
    Deste-me alturas de incenso,
    Mas a tua vida não.

    Povo que lavas no rio
    E talhas com o teu machado
    As tábuas do meu caixão.
    Pode haver quem te defenda
    Quem compre o teu chão sagrado
    Mas a tua vida não.

    Un viejo para oir degustando un vino joven).

    ResponderEliminar
  2. O poeta é um fingidor.
    Finge tão completamente
    Que chega fingir que é dor
    A dor que deveras sente ...

    (F. Pessoa)


    Tenemos suerte de vivir en la sociedad más transparente que hemos tenido nunca. A pesar de la globalización. Gusto de encontrar lusófonos na rede.

    ResponderEliminar
  3. Siempre imaginé que el Paraíso sería un bar donde poder tomar buen vino, comer un buen queso, escuchar un fado como suave música de fondo y tener una estanteria de buenos libros a mano.

    ResponderEliminar
  4. “Las crespas hebras de oro se esparcían
    por el cuello que al sol escurecía,
    las blancas tetas con andar bullían
    con quien Amor jugaba y no se vía,
    de la cinta unas llamas le salían
    de quel niño las almas encendía,
    por las lisas columnas revolaban
    deseos que cual yedra se enredaban.”

    Luis de Camoens, Las Lusiadas

    ResponderEliminar
  5. ¡Que felices dias, aquellos de abril de 1974!

    Grândola, vila morena
    Terra da fraternidade,
    O povo é quem mais ordena
    Dentro de ti, ó cidade.
    Dentro de ti, ó cidade
    O povo é quem mais ordena,
    Terra da fraternidade
    Grândola, vila morena.

    Em cada esquina um amigo
    Em cada rosto igualdade,
    Grândola, vila morena
    Terra da fraternidade.

    Terra da fraternidade
    Grândola, vila morena
    Em cada rosto igualdade
    O povo é quem mais ordena.

    À sombra duma azinheira
    Que já não sabia a idade
    Jurei ter por companheira
    Grândola a tua vontade.

    Grândola a tua vontade
    Jurei ter por companheira,
    À sombra duma azinheira
    Que já não sabia a idade.

    - - - - - - - - - - - - -

    Grándola, Villa Morena
    tierra de la fraternidad,
    el pueblo es quien más ordena
    dentro de ti, oh ciudad.

    Dentro de ti, oh ciudad,
    el pueblo es quien más ordena,
    tierra de la fraternidad,
    Grándola, Villa Morena.

    En cada esquina un amigo,
    en cada rostro igualdad,
    Grándola, Villa Morena
    tierra de la fraternidad.

    Tierra de la fraternidad
    Grándola Villa Morena
    en cada rostro igualdad
    el pueblo es quien más ordena.

    La sombra de una encina
    de la que no sabía su edad
    juré tener por compañera
    Grándola, tu voluntad.

    Grándola, tu voluntad
    juré tener por compañera,
    la sombra de una encina
    de la que no sabía su edad.

    ResponderEliminar
  6. HOLA-

    queria decir que deje un comentario en
    LA ROSA AZUL



    adios

    ResponderEliminar
  7. Hola, Mariluz, soy David, de JSO. Mi cabezonería de no apuntar tu mail ha pasado factura... porque yo al menos no lo encuentro por el blog. Mándanos por favor un mail a nuestra dirección (jsomsu@yahoo.es) y procedo a ponerte en el listado.
    Saludos,
    David

    ResponderEliminar
  8. El alma humana es una caja de donde siempre puede saltar un payaso haciendonos mofas y sacandonos la lengua. pero hay ocasiones en que ese mismo payaso se limita a mirarnos por encima del borde de la caja, y si ve que, por accidente, estamos procediendo segun lo que es justo y honesto, asiente aprobadoramente con la cabeza y desaparece pensando que todavia no somos un caso perdido.
    (De Sara Mago para vuestra inefable ministra de cultura)

    ResponderEliminar
  9. Alguien me envió la dirección de tu blog por su parecido con el mío. Yo acabo de empezar en esto. Cada día descubro algo nuevo y esta noche he aprendido bastante de ti. Gracias y enhorabuena.

    ResponderEliminar
  10. Hola Mari Luz, como te he dicho el otro día en la calle, felicidades por tu blog y que te dejaría un saludo, pero no antes de decirte que me he llevado una muy grata sorpresa al ver de mi tierra paterna y materna reflejados los Fados que tantas añoranzas me traen de mi niñez y de los momentos que he pasado e intento pasar siempre que puedo, ya que aunque he sido nacida aquí, por todo mi cuerpo corre sangre lusa.

    Aquí te dejo mi pequeña aportación en recuerdo a las canciones de Amalia Rodrigues que mi padre me ponía y que todavía conservo.
    Gracias porque me han hecho soñar despierta con cada cosa que han puesto y de la que me siento muy agradecida. Un saludo de la que ha sido tu compañera y ahora minera, y mis felicitaciones a ti y a Paloma Sainz por vuestro pequeño espacio que no me pierdo de leeros, siempre que el tiempo me lo permite. Muito obrigada.
    Fado Português

    Amalia Rodrigues
    ________________________

    O Fado nasceu um dia,
    quando o vento mal bulia
    e o céu o mar prolongava,
    na amurada dum veleiro,
    no peito dum marinheiro
    que, estando triste, cantava,
    que, estando triste, cantava.

    Ai, que lindeza tamanha,
    meu chão , meu monte, meu vale,
    de folhas, flores, frutas de oiro,
    vê se vês terras de Espanha,
    areias de Portugal,
    olhar ceguinho de choro.

    Na boca dum marinheiro
    do frágil barco veleiro,
    morrendo a canção magoada,
    diz o pungir dos desejos
    do lábio a queimar de beijos
    que beija o ar, e mais nada,
    que beija o ar, e mais nada.

    Mãe, adeus. Adeus, Maria.
    Guarda bem no teu sentido
    que aqui te faço uma jura:
    que ou te levo à sacristia,
    ou foi Deus que foi servido
    dar-me no mar sepultura.

    Ora eis que embora outro dia,
    quando o vento nem bulia
    e o céu o mar prolongava,
    à proa de outro veleiro
    velava outro marinheiro
    que, estando triste, cantava,
    que, estando triste, cantava.

    María.

    ResponderEliminar