JUSTICIA: NI EL MINISTRO NI LOS HUELGUISTAS

Llevo tiempo reflexionando acerca de escribir algo respecto a la huelga de funcionarios de Justicia porque no quiero pecar de dura, pero hoy ya llegué al límite de tiempo marcado.

Empiezo diciendo que el Sr. Ministro lo está haciendo mal, que a mi a titulo personal no me gusta porque lo encuentro un pelin sobrao y prepotente, ya que si las competencias de su ámbito no funcionan será su responsabilidad adoptar las medidas pertinentes para que funcione. Y a mi me da en esa parte de nuestra Administración, que además es uno de los Poderes del Estado necesitamos un Plan de Choque.

Pero dicho esto, la actitud de esos funcionarios y la hipotéticamente llamada "huelga" y digo esto porque yo siempre había entendido que si te pones en huelga no cobras, y en este caso por lo que me cuentan, si que pueden permitirse estar en esa actitud porque cobran a fin de mes, esa actitud digo, es de todo punto impresentable.

No digo que no tengan razón en sus reivindicaciones, pero de ninguna de las maneras pueden trasladar a los ciudadanos-usuarios el problema o problemas agravando sus ya de por si habituales zozobras cuando tratan con esa Administración.

No tiene un pase por mucho que se empeñen, en dejar parados o muy pero que muy ralentizados los trámites burocráticos que además nosotros no pedimos si no que nos obligan, impidiendo una eficaz actuación de la justicia.

El gobierno debe adoptar ya alguna medida drástica y yo propongo que empiece por descontarles el sueldo, con lo que nos ahorraremos mucho dinero, en primer lugar y se lo pensarán mejor seguir así en segundo. Por que si después siguen, igual les tengo más respeto, porque al menos se jugarán su dinero y no el mío.

Y porque ser funcionario público imprime carácter y no puede en modo alguno equipararse a trabajar en un Bar o en una fábrica de muebles, por mucho que algunos lo pretendan.

En cuanto al tema de fondo que al final y por mucho que se empeñen no es lo importante, de reivindicar acabar con los agravios comparativos, tampoco lo comparto. En la Administración Pública en general, incluida la de Justicia, debería funcionar de verdad, las RPT que son las Relaciones de Puestos de Trabajo, de modo que a igual trabajo igual salario, pero no necesariamente a igual Comunidad Autonóma igual salario, porque seguro que tampoco ganan lo mismo los camareros de Reus o de Palma o de Canarios que los de Oviedo, ni los informáticos que se van a Madrid o a otras ciudades europeas.