09 diciembre 2005

80 ANIVERSARIO DE LA MUERTE DE PABLO IGLESIAS

Bueno, (la palabra mágica para algún amigo mío), que maravilla y que gozada, que algunos compañeros socialistas sigamos recordando con cariño y fervor al fundador del Psoe Pablo Iglesias.
Esta tarde en Pola de Laviana no había muchos, pero sí los suficientes para rememorar una fecha tan señalada. El 9 de Diciembre de 1925 fallecía en Madrid Pablo Iglesias.
El 9 de Diciembre de 2005, en la Casa del Pueblo de Pola de Laviana, un grupo de compañeros le rendimos homenaje a través de un formato que a mi me gustó:
una ofrenda floral ante el busto del "abuelo", obra de Pepe Noja y varias intervenciones:
Aida leyendo un texto de Rosa Chacel en el que cuenta cómo con 16 años votó a Pablo Iglesias, a través de su padre, al que convenció para que le votara cuando su intención era hacerlo en blanco.
Nuestro querido Pablo García, con unas palabras preciosas de Antonio Machado y Marcia, el alcalde, con otras de Fernando de los Ríos sobre la muerte del "abuelo".
También nos dirigieron la palabra, Solis, Secretario General de una Agrupación que de todas las que conozco, y no quiero darmelas de nada, pero conozco muchas, incluso de fuera de Asturias, es la más auténticamente socialista y Adrián Barbón que nos animó a todos, no solo dirigiendo el canto "a capella" de La Internacional, sino recordando en su discurso, que compartimos con Pablo Iglesias su "pasión por la libertad". Gracias Adri.
Y por último la intervención de Benjamín Gutiérrez, Secretario de Política Municipal y Formación de la Federación Socialista Asturiana, cuyo discurso se reproduce aquí:
"Es una profunda satisfacción compartir este acto con todos los aquí reunidos. Los aniversarios, y máxime cuando se trata del de Pablo Iglesias, son una muy buena ocasión para refrescar la memoria. Buena ocasión que es preciso aprovechar, ya que tras casi cuarenta años de dictadura, en los que hubo que bajar la voz, pero jamás la cabeza, soy de la opinión que la falta de memoria, en demasiados casos rayana en la amnesia, es uno de los rasgos característicos de la España que desde 1978 estamos construyendo.
A esa actitud "prudente" o más bien timorata, diría yo, de la que viene haciendo gala la sociedad española, se contrapone el empeño continuo y más intenso últimamente, de algunos presuntos intelecturales, en intentar justificar la rebelión militar contra la República y la Dictadura, reescribiendo sobre renglones torcidos un pasado que nunca existió y, a los que curiosamente acompaña un "sorprendente" éxito editorial.
Y digo que es buena cosa, porque la ciudadanía en una sociedad civilizada, cada vez más mediática y globalizada, como la nuestra, se nutre también de sus tradiciones, su cultura, sus narraciones... en definitiva, su Historia. Por eso, y porque es también nuestra obligación, desde la Secretaría de Política Municipal y Formación, queremos aprovechar los aniversarios, por fuerza frecuentes en un viejo Partido como el nuestro, para ejercitar la memoria y también po que entendemos que conocer mejor nuestro pasado nos puede ayudar a construir más eficazmente el futuro de esa Asturias y España que anhelamos.
En este caso, además, el aniversario no es el de un personaje gris que transitará por los márgenes de la Historia, si no el ochenta aniversario del fallecimiento de Pablo Iglesias, fundador del socialismo español, del Partido Socialista Obrero Español y de la Unión General de Trabajadores y sin ninguna duda una de las personalidades más egregias de la Historia de España y del socialismo.
Bien merece pues, aprovechar la efemérides para rendirle un austero y sencillo homenaje, tal como él era y qué mejor sitio para hacerlo que aquí en Laviana, ante su imagen esculpida en bronce por un socialista como Pepe Noja, Presidente de la Agrupación Socialista de Laviana y después a través del video "Pasión por la libertad" rescatar su recuerdo, reflexionar sobre su pensamiento y admirar su trayectoria vital y política. Los escritos sobre Pablo Iglesias de Rosa Chacel, Antonio Machado y Fernando de los Ríos, en la voz de nuestros compañeros y compañera, nos recuerdan muchas cosas en la imaginación de los socialistas que no tuvimos la fortuna de conocerlo.
En primer lugar, el respeto, la admiración y el extraordinario reconocimiento que suscitó su figura, no solamente entre los que pensaban como nosotros, sino también, y con independencia de su ideología, en las figuras más insignes de la época.
Para nosotros, nos evoca la rebeldía primordial del adolescente, sólo en su rebeldía...cuando vuelve despedido a casa.. en la que sin su salario no hay apenas que comer. Es el Pablo Iglesias que nos habita cuando la gente de nuestro entorno trata de desanimarnos con prudentes llamadas al pragmatismo.
El Pablo Iglesias encarcelado que no pide clemencia cuando lucha, que convierte su sufrimiento en vergüenza para quienes lo provocan y para los neutrales ante la injusticia. El Pablo Iglesias que lee, que devora libros (mira que guay en algo me parezco, esto es de mi exclusiva cosecha) en aquellos tiempos que no había Internet (juro que yo no le incité a decir ésto) en la búsqueda de las ideas del socialismo. Es el Pablo Iglesias de la idea, del proyecto que diríamos ahora. Un hombre que cree en el poder de la razón y de la palabra. El Pablo Iglesias que cree en la organización, el hombre del Partido y del Sindicato, el que tiene la firme convicción de que éste es un trabajo de muchos, de muchos hombres y mujeres organizados. Que cree que todo es soportable cuando mira alrededor y ve que no está solo.
El Pablo Iglesias paciente y sereno, que construye a largo plazo y que no se deja deslumbrar por fáciles oportunismos. Enraizado profundamente en sólidos principios, la paz, la democracia, libertad y la solidaridad y que no se deja llevar por modas políticas más o menos exitosas.
Es el concejal y parlamentario, el hombre que representa en las Instituciones a los oprimidos frente a los poderosos, con criterio político y siempre del lado de los más débiles.
Y todo ello y mucho más, que si lo expusiera hoy aquí, haría interminable esta intervención, lo desarrollaba con sencillez, con humildad, poniendose al mismo nivel que los cientos de miles, hombres y mujeres, militantes de la UGT y del PSOE que le consideraban su maestro y que cariñosamente se referían a él como "el abuelo", y al que tal vez no llamasen "padre" porque en un Partido tan laico como el nuestro, ese apelativo no tendría mejor sentido.
Queridos amigos y amigas, para finalizar, permitidme tomar para mí prestadas las palabras de Largo Caballero referidas a Pablo Iglesias:
"Primero hay que tener ideales, luego hay que saber defenderlos... Imitémosle en todo aquello que podamos. No podremos superarle en nada, pero seguirle, con austeridad hasta el fin de nuestros días, SI.."
Si habeis llegado leyendo hasta aquí, primero gracias, y después, seguid las enseñanzas del "abuelo".

3 comentarios:

Anónimo dijo...

Resulta reconfortante leer que todavia alguien cree, que la acción política se legitima en función de unas ideas, en tanto que no trata de justificar la realidad sino de transformarla.
Digo esto, por que estoy bastante harto de soportar "politicas" justificando "algunos hechos" que en cuanto que defensoras del statu quo, son inequivocamente conservadoras.

Enrique Castro dijo...

Excelente post, y lastima que no pude asistir al acto, me hubiese gustado.

Sin embargo, coincido contigo en lo desapercibido por muchos socialistas ( yo el primero y el último) en no celebrar efemérides como estas.

Un abrazo desde Santiago de Compostela, rosa de piedra.

Anónimo dijo...

Supongo que se refiere a otro Pablo Iglesias, y no al que defendió el uso del terrorismo como instrumento político, o amenazó de muerte a otro diputado. Que diferencia entre estos dos Pablos !